Obras peligrosas si las hay, es “Las de Barranco”. Porque se presentó infinidad de veces, porque todo tipo de actores la han protagonizado, desde primeras figuras hasta novatos absolutos; y porque su tema puede quedar totalmente desactualizado. ¿Entonces por qué ir a ver la obra de Gregorio de Laferrere habiendo tantas obras en cartel? Por un motivo más que concluyente: la sobresaliente actuación de Lorena Bruquetas. Pasando del drama a la comedia en tan solos segundos, guiños o latiguillos. Ella, además de ser la madre de todas las hijas de Barranco, es la titiritera ideal para que todo el resto se luzca. Un reparto que encuentra momentos de máxima capacidad actoral en los papeles de Mónica Stricker como Pepa, Daniel Strada (Barroso) y Gerardo Longo (Rocamora).
La historia es muy conocida y germina en el afán de Doña María, la viuda del Capitán Barranco, en salir de su decadencia económica, a costa de alguna de sus hijas. Cualquiera de las tres puede ser la carnada, pero es Carmen –quien tiene expectante a todo el pueblo– la primera opción de su madre. Una obra que habla de la codicia, la avaricia, el interés y la ausencia de moral. Al parecer, Doña María (Lorena Bruquetas) puede con todo lo que se lo oponga, pero habrá que ver cómo lidia cuando el amor se hace presente.
Con un impecable vestuario diseñado por María Eugenia Martínez Allende y una escenografía exacta para la puesta, “Las de Barranco” se convierte en la propuesta ideal para rememorar el teatro clásico de nuestro repertorio nacional. Aunque sea halago sobre halago, la dirección de su protagonista, Lorena Bruquetas, parece ser el timón ideal para conducir este barco multitudinario, a buen puerto.
“Las de Barranco” es teatro en toda su dimensión. Un volver al 1900, cuando este tipo de obras, se realizaban en los viejos teatros porteños. Con el Colonial como monumento actual. Un clásico en todos los sentidos, que por suerte, podemos vivir en pleno 2014.
Todos los sábados a las 21hs., en el Teatro Colonial, Paseo Colón 413 (Esquina Av. Belgrano), C.A.B.A. - Argentina. Reservas: 4342-7958. Costo entrada $70. (Estudiantes y Jubilados $50).
Por Axel Serrano
@estaenbaires
miércoles, 26 de marzo de 2014
"Dos pícaros sinvergüenzas"
Guillermo Francella y
Adrián Suar, protagonizarán el estreno en Argentina de "Dos pícaros sinvergüenzas"; la genial
comedia basada en la película de culto del mismo nombre; de Jeffrey Lane, bajo la dirección
de Marcos Carnevale y producción general de Pablo
Kompel, Guillermo Francella y Adrián Suar.
El estreno de "Dos pícaros sinvergüenzas" está previsto para el 8 de abril de 2014 en la Teatro Metropolitan Citi, Av. Corrientes 1343, Buenos Aires.
El estreno de "Dos pícaros sinvergüenzas" está previsto para el 8 de abril de 2014 en la Teatro Metropolitan Citi, Av. Corrientes 1343, Buenos Aires.
Uno tiene un aire glamoroso y sofisticado. El otro…bueno, tan solo un aire.
Juntos, Lawrence Williams (Guillermo Francella) y Freddy
Benson (Adrián Suar), son dos estafadores de mujeres
inocentes y fabuladores plenos de encanto que estarán arruinando la Costa Azul
en esta divertida e irreverente comedia.
Estamos en el verano en la Riviera Francesa. La temporada acaba de comenzar
en Beaumont Sur Mer y su más reputado ciudadano, Lawrence Williams,
un estafador de guante blanco, asume el personaje de un príncipe derrocado de
un país ficticio. Lawrence apunta a seducir mujeres ricas y
faltas de cariño, que puedan sentirse felices de financiar y “contribuir a la
causa” de recuperar el trono real. Lawrence considera que se
trata de un intercambio justo: el ofrece fantasías y aventuras; ellas se dejan
llevar y entregan - entre otras cosas - sus propias fortunas. Sin
embargo, los planes se complican cuandoLawrence descubre
que su territorio ha sido invadido por “El Chacal”, un astuto estafador de poca
monta. Pronto ambos contrincantes se enfrentan cara a cara y Freddy,
un manual viviente de la falta de clase, utilizará cierta cuota de extorsión
para obligar a Lawrence a tomarlo como su protegido y “pulirlo como diamante”.
Todo esto sucederá pese a los temores y advertencias de André (Pablo
Codevilla), su mano derecha; quien no sólo es sumamente leal sino también
sumamente corrupto…ya que se trata del propio Jefe de Policía de la ciudad.
Ambos estafadores descubrirán que la armonía es ínfima y, reconociendo
que Beaumont Sur Mer es demasiado pequeña para soportar a ambos, deciden
realizar una apuesta para resolver el conflicto: el primero que logre extraer
“limpiamente” u$s 50.000 de una dama será el ganador y el otro deberá abandonar
definitivamente la ciudad. Quién será la víctima? La respuesta
llega de la mano de Charlotte Skip (Gimena Accardi), la
reina del jabón para lavar la ropa. Pero claro, la aventura de seducción
recién comienza, y nuestros pícaros sinvergüenzas no saben lo que les
espera…
El elenco de "Dos pícaros sinvergüenzas" se completa con Pablo Codevilla y Gimena Accardi;
así como un reparto integrado por Eliseo Barrionuevo, Rodrigo Cecere, Natalia
Cocciuffo, Diego Hodara, Melania Lenoir y Belen Pasqualini. El diseño de
escenografía está a cargo de Alberto Negrín, el diseño de luces a
cargo de Gonzalo Córdova y el vestuario a cargo de Mónica
Toschi; junto con la supervisión musical de Gerardo
Gardelín y las coreografías de Elizabeth de Chapeaurouge.
.Guillermo Francella y
Adrián Suar regresan como dupla explosiva al teatro luego de protagonizar juntos La
Cena de los Tontos, uno de los mayores éxitos de la cartelera teatral
del país.
"Dos pícaros sinvergüenzas" está basada en la película de culto de 1988 protagonizada por Steve Martin
y Michael Caine, dirigida por Frank Oz; y en el musical de Broadway de 2005, el
cual fue nominado a 10 premios Tony y 10 premios Drama Desk (ganando el de
Mejor Actor Protagónico en ambos premios).
"Todos Mis Miedos"
Los domingos a las 18 hs. se presenta en el Abasto Social Club (Yatay 666), Todos Mis Miedos, espectáculo con dramaturgia y dirección de Nahuel Cano y que protagonizan María Abadi y Pablo Seijo.
Este espectáculo es uno de los siete ganadores en Artes
Escénicas de la Bienal Arte Joven Buenos Aires (seleccionados a
partir de una convocatoria a la que se presentaron más de 150 proyectos), fue
producido por la Bienal y contó con la tutoría de Marcelo Savignone
en colaboración con Maruja Bustamante.
Sobre Todos mis miedos
A los 45 años, Bruno es un escritor en crisis. Un
divorcio complicado, un romance con una alumna y la escritura de su nueva
novela lo condenan a una repetición infernal. Para él la realidad se presenta
cada vez más pesadillesca y todo se confunde: el amor, la literatura y la
muerte. Poco a poco las personas van tomando consistencia de fantasmas. Lo
real, la ficción y la escena se desdoblan y se pliegan sobre sí mismos,
cuestionándose constantemente cómo dar cuenta de la confusión e intensidad emocional
de una crisis, cómo narrar, qué es representar.
Palabras de
Nahuel Cano sobre la obra
Una crisis, por un tiempo, lo que deja es confusión, pero
lo que realmente aterra es que pronto la realidad empieza a imitar a nuestras
emociones. Todo el universo se confunde, el tiempo está fuera de quicio. Un
devenir emocional, en donde los personajes circulan sin saber bien qué hacer
con lo que les pasa. Están perdidos en sus emociones. Un espacio crudo. La sala
al descubierto. Donde se ve todo, absolutamente todo. Incluso el público. Un
ring. No hay detalles realistas, solo funcionales. Y los libros, con el peso de
la ficción y la contundencia de lo real se transformaran en la trampa de los
cuerpos. Todos Mis Miedos se presenta como un drama emocional,
pero al mismo tiempo no deja de cuestionarse sobre los vínculos entre realidad
y ficción, entre representación y presente escénico, entre teatro y literatura.
La obra indaga, en definitiva, sobre los límites, los bordes, los pliegues,
entre ficción y performance. Sin embargo, por sobre todas las cosas la
pretensión de la obra es afectiva, es sumergir al espectador en ese torbellino
de emociones, que será finalmente lo que nos lleve a preguntarnos, ¿es todo
esto real, o es el peor de los sueños posibles?
Dice Marcelo Savignone, tutor de la obra: “Todos mis miedos es una maquinaria teatral que nos
invita a percibir infinidad de signos, con los cuales el espectador construye
su propio relato. Una teatralidad que pone en juego los límites de la ficción,
interpelando la creación.”
La Bienal Arte Joven Buenos Aires es una
plataforma de producción, formación y exhibición para artistas de entre 18 y 32
años, que apunta a consolidarse como un espacio donde puedan surgir y
posicionarse nuevos lenguajes y formas de expresión a través del arte.
Se trata de una iniciativa de la Dirección General de
Políticas de Juventud que depende de la Vicejefa de Gobierno de la Ciudad
de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, que apoya la producción y circulación de
bienes culturales promoviendo la formación y profesionalización de artistas al
tiempo que fomenta el intercambio y vínculo de actores culturales entre sí y con pares de la escena nacional e internacional.
"Incrustaciones o el Paladar de la Reina"
Si por esas casualidades del destino, perdemos el programa al entrar a la sala y nos dicen burlonamente que la obra es francesa y que está en el Belisario por una gira que hace su director por Sudamérica, al escuchar su melodía introductoria, lo creemos. Claro, después escuchamos a los protagonistas hablar en castellano y comenzamos a dudar. Pero eso tiene la directora Nela Fortunato, nos va hipnotizando con musiquitas, pausas, silencios, gestos y fotografías estéticas, hasta hacernos perder en tiempo y forma. Y las vidas de Patrick y Raymonde nos conquistan. Al principio, suponemos que el amor reinará la escena, cuestión que con el progreso de la obra, no estaremos tan seguros. O sí.
Bajo la fisonomía del arte Lecoq, ese de máscaras venecianas se que cuelgan con estilo en cualquier pared de culto y bajo aristas del teatro físico, la obra nos lleva de la mano por los caminos inevitables del corazón. Ese que marca un encantamiento, un enamoramiento y una desilusión. En el orden que queramos y con la tutela de la madre de nuestro héroe apagado. Ella, la madre o la suegra, según el árbol genealógico que analicemos, es quien le pone termómetro a todo. La historia es sobre un hombre y una mujer que se enamoran, con el visto bueno o malo de la madre de él, o sea la suegra. Pero es todo tan artístico, que decirlo así, hace que esta crítica no esté a la altura de las circunstancias, o sea, de los visto.
Con una exquisita música de Juan Sevlever y las actuaciones precisas y contundentes de Yanina Olocco y Cristian Cabrera, “Incrustaciones o El Paladar de la Reina”, se convierte en una perlita de lujo del actual teatro porteño. Como esas cajitas chinas que no dan ganas ni de tocarlas para no romperlas, solo de admirarlas y angustiarse por no ser los dueños. Muy recomendable si por una hora uno quiere volar por los recovecos del sentimiento parisino y de los claroscuros que el amor tiene preparado para cada uno de nosotros.
Con la impecable dramaturgia de Chantal Thomas, es Nela Fortunato quien le imprime talento y calidad cinematográfica a cada segundo de la obra. Una historia chiquita, pintada con acuarelas de refinado brillo.
Todos los domingos a las 20hs., en el teatro Belisario Club de Cultura, Av. Corrientes 1624., C.A.B.A. – Argentina. Entrada general 80$ (Descuentos para jubilados y estudiantes $60). Reservas: 4373-3465 y/o mail: paladaresincrustados@gmail.com
Por Axel Serrano
@estaenbaires
martes, 4 de marzo de 2014
“A solas con Marilyn”
Dos preguntas sobrevuelan la cabeza de aquella pobre mujer:
“¿Qué puede darte ella, que yo no pueda?” y “¿qué encontraste en ella, que no
encontraste en mí?”. Intrigas del amor que resuenan y carcomen todo corazón que acaba de ser destrozado por
el engaño y el abandono. De esto trata “A solas con Marilyn”. Del adiós
obligado e inesperado. De la traición cuando la vida comienza a multiplicarse y
de la oscuridad, cuando se fantasea con la luz eterna.
Pero Alfonso Zurro en su prosa es implacable y va por todo.
Si existen los peores finales posibles, él lo multiplica. Porque no se mete con
la muerte, se mete con la vida. Y como juez y parte expone a una simple y pobre
mujer, que completamente desesperada, corre entre la cordura y la locura. Como
si fuera una delincuente se auto expone sus pulsiones con una luz incandescente,
para dejar evidencias de las miserias que la vida la llevaron a cometer. El
tiempo dirá si la querremos u odiaremos.
Con la soledad escénica que obliga un unipersonal, Belén
Fernández Díaz, nos atrapa con su goteante voz. Un marcapasos al inicio para
describirnos por donde irá su monólogo. De humor poco y nada; de drama, todo y
más. La obra es un dramón de aquellos y ella le pone, con su acertada actuación
y personalidad, sal a todas las heridas que va dejando a puro rasguño en su
defensa.
Todo parece tener una precisión de fórmula física. El piso,
la puerta, y esa cuna, reja, jaula o pozo, donde su protagonista se refugia
para aplacar tanto dolor. Las luces, la música y esa patética performance al
son de la canción “La Catalina”, estremecen.
Si la avenida Corrientes se destaca por su humor, brillo y
comedias musicales, “A solas con Marilyn” viene a opacar tanta espuma con un sorbo
de tristeza. Tal vez podamos encontrar alguna alegría entre su verborragia. Tal
vez. Quizás. Depende cada uno.
Todos los
sábados a las 21hs. en el teatro Belisario Club de Cultura, Av. Corrientes
1624., C.A.B.A. – Argentina. Entrada general 80$ (Descuentos para jubilados y
estudiantes $60). Reservas: 4373-3465.
Por Axel Serrano
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